martes, 8 de enero de 2013

Haciendo caso del casi-Jedi

He suprimido el post porque tienes razón, casi-Jedi. ¿Quién soy yo para juzgar? Me va a traer más problemas que satisfaccones haber escrito eso. Pero como no quiero censurar nada de lo escrito aquí, a tu comentario:
 
"Las leyendas forjadas por uno mismo permiten a ese uno reconciliarse consigo mismo y el propio pasado. No seas tan duro y piensa que además posiblemente necesite reconciliarse con su presente"... (7 de enero de 2013 22:24),
 
 ...te respondo:
 
"Pues perfecto. Si me parece muy bien, pero no a costa de tocarme los güebos a mí. ¡Pues no tengo yo defectos y pajas mentales!, Miles, más que nadie. Soy un puto saco de contradicciones. Pero no me dedico a ir tocando los güebos al prójimo. Me hago un blog y suelto el veneno que llevo dentro porque si me muerdo la lengua me intoxico. Y el que quiera que lo lea y el que quiera que lo comente... Como dice mi amigo Pablo, 'aquí todos van a la suya, menos yo que voy a la mía".

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Si me censuras tampoco pasa nada.

Desde luego no creo que juzgases, eso sería juzgarte a tí y tengo demasiados muertos en el armario para opinar sobre nadie, sino que escribiste sobre lo que enlos últimos meses te toca los huevos de quienes a estas alturas quieren dar lecciones.

Ytu contestación va en la misma línea, la de las grandes ocasiones que pierden algunos de quedarse callados. Pero ya sabes, muchos prefieren demostrartar que son imbéciles en lugar de callar y sólo parecerlo.

Un abrazo ( única parte del comentario no censurable)

Feroz dijo...

joder, qué putada haber llegado tarde, ahora me reconcome la curiosidad...

Anónimo dijo...

Pues ya sabes que la curiosidad mato al gato. Así que ya sabes no preguntes no vayas a cargarte al gato bloguero.